Imagina esto: un cliente está a punto de comprar ese producto que tanto le gusta, pero cuando llega el momento de pagar… duda. No porque no le encante lo que ofreces, sino porque en ese momento no puede asumir todo el coste de golpe. ¿Resultado? Abandona el carrito. 😓
Aquí es donde entran en juego los métodos de pago flexibles, como Klarna, SeQura o Aplazame. Opciones que permiten al cliente dividir el pago en cómodos plazos o aplazarlo, sin necesidad de tener una tarjeta de crédito tradicional o pedir un préstamo bancario. Y para ti, como ecommerce, puede ser la diferencia entre cerrar una venta… o perderla.
¿Qué son los métodos de pago a plazos?
Los métodos de pago a plazos son plataformas que se integran en tu ecommerce y permiten al cliente pagar sus compras en varias cuotas, generalmente sin intereses (al menos para ellos), o diferir el pago completo durante unas semanas o meses. Son una forma de financiación rápida, digital y sin fricciones.
Algunos ejemplos muy conocidos son:
- Klarna: muy popular en Europa, ofrece pagar en 3 plazos sin intereses o pagar en 30 días.
- SeQura: plataforma española que permite fraccionar pagos, pagar después o incluso pagar mes a mes.
- Aplazame: integrada con muchas tiendas Shopify y Woocommerce, permite plazos flexibles de hasta 12 meses.
Todas ellas se integran fácilmente en tiendas online, y asumen el riesgo de impago. Tú cobras el importe completo al momento.
Beneficios de ofrecer pago a plazos en tu ecommerce
1. Reduce el abandono de carrito
Muchos clientes abandonan el carrito cuando ven el total de la compra. Dar la opción de pagar poco a poco elimina esa fricción. Pueden permitirse comprar sin tener que asumir todo el gasto en ese instante.
2. Aumenta el ticket medio
Cuando alguien sabe que puede pagar en 3 o 6 plazos, está más dispuesto a comprar productos de mayor valor. Implementar un método de pago flexible puede disparar tus ventas en productos premium, packs o incluso compras de varios artículos.
3. Mejora la conversión
Tener varias formas de pago adaptadas a diferentes perfiles de cliente (débito, crédito, Bizum, fraccionado…) mejora notablemente la tasa de conversión. Cuantas menos barreras pongas en el proceso de pago, más fácil es que se complete.
4. Fideliza y mejora la experiencia de cliente
Dar opciones de pago muestra que piensas en las necesidades de tus usuarios. Es una forma de facilitarles la vida y adaptarte a su realidad económica, especialmente en épocas de incertidumbre o en campañas clave como Black Friday, Navidad o rebajas.
5. Sin riesgo para el ecommerce
La mayoría de estas plataformas asumen el riesgo del impago. Tú como tienda online recibes el pago completo, menos una comisión, pero sin preocuparte de gestionar la financiación ni posibles morosos.
¿Qué tener en cuenta antes de implementar uno?
Antes de lanzarte a integrar un método de pago flexible, es importante que analices algunos factores clave para asegurarte de que la herramienta se adapta a tu ecommerce y a tu cliente ideal.
En primer lugar, revisa las comisiones. Estas plataformas suelen cobrar entre un 2% y un 5% por operación. Puede parecer mucho, pero si ese pequeño coste te permite reducir carritos abandonados, aumentar el ticket medio y mejorar la conversión, probablemente te compense. Haz cálculos.
También es importante valorar la integración técnica. Por suerte, si trabajas con plataformas como Shopify, WooCommerce o Prestashop, la mayoría de estos métodos de pago ya tienen módulos o integraciones listas para instalar en pocos clics.
Otro aspecto clave es la comunicación al cliente. No basta con tener el método activado: hay que informar y destacar esta ventaja competitiva. Incluye mensajes visibles en las fichas de producto, el checkout e incluso en banners de campaña o newsletters para que tus clientes sepan que pueden pagar cómodamente.
Y por último, asegúrate de cumplir con las normativas legales: informa de forma clara y transparente sobre las condiciones de financiación. La plataforma de pagos te suele proporcionar todo lo necesario para hacerlo correctamente, pero nunca está de más revisarlo desde tu ecommerce.
¿Cuándo es especialmente útil ofrecer pago flexible?
Aunque puede funcionar en cualquier tipo de ecommerce, hay escenarios donde el pago a plazos marca la diferencia. Uno de los más evidentes es cuando vendes productos de ticket medio o alto, como moda premium, tecnología, electrodomésticos, muebles o cosmética de lujo. El pago fraccionado permite a más clientes acceder a productos que, de otro modo, se quedarían fuera de su presupuesto inmediato.
También es muy útil cuando vendes packs o bundles, ya que el importe total suele ser más elevado y puede generar dudas en el momento de pagar. Fraccionarlo suaviza el impacto psicológico del precio final.
En campañas estacionales como el Black Friday, Navidad, rebajas o vuelta al cole, donde el gasto del consumidor se dispara, ofrecer este tipo de financiación puede ser decisivo para cerrar la venta.
Y por supuesto, en contextos económicos inciertos o de baja capacidad de ahorro, como los que vivimos últimamente, los métodos de pago a plazos se convierten en un recurso que da tranquilidad al cliente y estabilidad a tus ventas.
Paga como quieras, vende más
Integrar métodos de pago flexibles como Klarna, SeQura o Aplazame es una decisión estratégica. No solo facilita las compras, sino que aumenta las ventas, mejora la conversión y refuerza tu propuesta de valor.
En Fran&Clau te ayudamos a implementar estas soluciones en tu tienda online, adaptarlas a tu diseño, comunicarlas correctamente y aprovecharlas al máximo.
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Porque vender más no siempre es cuestión de hacer más ruido… a veces es cuestión de dar más facilidades.